Industria cultural e industria tecnológica, ¿enemigos o aliados?

Este articulo se publicó en el número 201-202 (Agosto 2011) de la Revista Temas para el Debate dentro de un especial bajo el titulo: Conflictos en la Red.

El futuro de la Industria de Contenidos Digitales en España.

Los avances en el desarrollo de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, TIC, impulsados por el desarrollo de la computación e Internet, han sido extraordinarios en los últimos años. Estamos viviendo la evolución e innovación tecnológica más profunda de toda la historia de la humanidad. El desarrollo de la Sociedad del Conocimiento, junto a la llamada revolución digital,está siendo el factor determinante para el desarrollo de los procesos de globalización política, económica, y cultural que estamos viviendo y están transformando las relaciones políticas, económicas y sociales de nuestra sociedad.Revista Temas para el debate

El valor del sector de las TIC, no sólo viene del desarrollo de sus mismas tecnologías y de sus empresas, sino también y sobre todo por el impacto transversal que su implantación tiene en la sostenibilidad económica, social y ambiental de nuestra sociedad. El crecimiento de la economía en general está totalmente vinculado con la extensión de sus tecnologías y servicios.

Las TIC son imprescindibles para el desarrollo de la llamada Sociedad Digital, que está transformando profundamente nuestra forma de vivir y nuestro entorno. Contribuyen a la creación de riqueza y al bienestar de los ciudadanos. Sus infraestructuras y tecnologías son esenciales para la creación, intercambio y difusión del conocimiento y facilitan el desarrollo cultural, aportando modelos de negocio que permiten nuevas formas de creación y difusión artística.

El sector TIC en España se convertirá en los próximos 15 años en el segundo de mayor contribución al PIB en España. Dentro de las TIC, el subsector de los Contenidos Digitales será el de más rápido crecimiento. Esta Industria superó los 9.600 M€ de facturación en 2010, con un crecimiento interanual del 32,7%. Entre 2003 y 2010, la facturación de este sector prácticamente se ha triplicado. La digitalización esta transformado a las empresas de los contenidos, sólo en los 5 últimos años los ingresos por formatos digitales ha pasado del 23% de la facturación total del sector al 45,5%.

El sector evoluciona a un ritmo muy superior al de otros sectores económicos. Todos los datos muestran el uso cada vez más intensivo que ciudadanos y empresas hacen de los contenidos digitales. Los cambios de paradigmas y modelos de negocio se suceden vertiginosamente y trascienden de los límites del propio sector, cambiando y favoreciendo a otras muchas ramas de la actividad económica. En los próximos años, la recuperación económica y la normalización del consumo, la migración de lo analógico a lo digital, los avances tecnológicos, el desarrollo de las nuevas redes ultrarrápidas, la extensión de la banda ancha en movilidad y el aumento de la velocidad de acceso representan factores claves que permitirán el crecimiento del mercado de los contenidos digitales.

En este contexto, esta Industria es esencial para impulsar el desarrollo de la Sociedad del Conocimiento en España, y con ello, contribuir al crecimiento económico de nuestro país y a la extensión de un modelo económico basado en lo digital. Tiene uno de los mayores potenciales de crecimiento de nuestra economía, y es un motor fundamental de la innovación, del desarrollo social y económico, en disposición de crear empleo de calidad y estable. Hay que añadir que nuestro país cuenta con la capacidad para desempeñar un papel importante a nivel mundial en el ámbito de los contenidos digitales.

Para asentar esta realidad hace falta un amplio apoyo de todos los agentes implicados en el desarrollo de esta Industria. Las administraciones deben fijarse el objetivo de crear las condiciones adecuadas para la extensión de los servicios ligados a la evolución digital de los contenidos. Las claves donde se debe poner el esfuerzo pasan por: El apoyo a la transformación hacia lo digital; la incentivación del emprendimiento y la articulación de mecanismos que faciliten el acceso a la financiación y a la transferencia del conocimiento; el desarrollo del tejido empresarial y el apoyo a las Pymes;, la internacionalización de la Industria; el fomento de nuevos modelos de negocio online; el desarrollo de las iniciativas de I+D+i; el apoyo a la formación de profesionales especializados; y la defensa de la propiedad intelectual, alcanzando una fórmula que permita conjugar la defensa de los legítimos intereses de todos los agentes, contribuyendo así al crecimiento del sector.

Las políticas públicas deben dirigirse a facilitar la accesibilidad de los contenidos, fomentando un incremento de la demanda de los mismos en la sociedad, que fortalezcan el conjunto de actividades de la cadena de valor de la Industria. En un contexto globalizado, cobra sentido el desarrollo de cadenas de valor en las que participen múltiples agentes de diferentes sectores y tamaños. En este sentido, hay que felicitarse de las iniciativas del Ministerio de Industria que van en esta dirección, como son el Plan Avanza2 y más recientemente el Plan de Impulso de la Industria de los Contenidos Digitales-

Las facilidades de las TIC y la universalización de la red permiten nuevos modelos de negocio, más abiertos, más participativos y sobre todo más creativos. Las oportunidades para extender las creaciones culturales son más accesibles y disponemos de medios más potentes y versátiles para su difusión y comercialización. Se está democratizando la creación y el acceso a la cultura.

La red y el desarrollo de la Sociedad de la Información se han convertido en las mayores aliadas de la creación cultural y los creadores. Los nuevos modelos de negocio digitales son la opción para la difusión de los productos culturales del Siglo XXI y son el futuro de las Industrias Culturales tradicionales.

Las redes y las tecnologías, no tienen valor sin la conversación, la participación, la información y los contenidos digitales. Estos, en todas sus vertientes, hechos por los usuarios o por la industria cultural, la de videojuegos, o la de software, la de la música o el cine, gratuitos o de pago, son necesarios para crear un ecosistema que mantenga el crecimiento y la extensión de Internet, las TIC y el desarrollo de la Sociedad Digital.

Por esto, el sector de los Contenidos Digitales ha constituido una prioridad estratégica de las empresas españolas del macrosector de las Tecnologías de la Información y la Comunicación. En un contexto globalizado y de convergencia digital, cobra sentido el desarrollo de cadenas de valor en las que participen múltiples agentes de diferentes sectores y tamaños. Por esto, la necesaria colaboración entre los sectores TIC y la industria cultural es fundamental para el desarrollo de estas dos actividades económicas.

Otro factor importante es el potencial del español como valor fundamental para el desarrollo y difusión de los contenidos digitales. La amplia presencia del español en la red –casi el 9% de los usuarios de Internet a nivel mundial utilizan nuestro idioma– sólo superado por el inglés y el chino, otorgan unas posibilidades inmejorables para la producción y comercialización de contenidos en español que nuestra Industria debe saber aprovechar.

Sin embargo, este prometedor Sector también se enfrenta a riesgos que, de materializarse, pueden dar al traste con su evolución y malograr las oportunidades de desarrollo económico que nos ofrece y lo que es peor retrasar el desarrollo de la Sociedad Digital en España.

El despliegue de infraestructuras de banda ancha, unido a la introducción generalizada de equipamiento tecnológico en los hogares y las empresas, ha trastocado toda la cadena de valor de la Industria cultural y de los contenidos. Los nuevos usos culturales y sociales propiciados por Internet están transformando radicalmente los mercados culturales. Los sectores tradicionales de la cultura se están reconvirtiendo a lo digital, no sin dificultades. El sector se encuentra en plena reconversión y son muchas las incertidumbres que se dibujan en el horizonte para todos y cada uno de los agentes que intervienen en el proceso: Desde el creativo al distribuidor; del regulador al fabricante; del productor al consumidor. Estos agentes tienen que combatir, no sólo la crisis económica, sino también otros problemas más específicos del Sector, como son la vulneración de los derechos de autor o la piratería.

Creemos, sin ninguna duda, que la defensa de los derechos de la propiedad intelectual de los contenidos digitales es irrenunciable. Esta defensa debe realizarse en el marco de los tres ejes que deben incorporarse en cualquier actuación: Un marco legal ágil y adecuado, una oferta legal apropiada, y la concienciación de los usuarios, en particular de los segmentos más jóvenes.

La opción más responsable es la del diálogo y la colaboración de todas las partes implicadas con el fin de buscar nuevas propuestas que permitan avanzar en un modelo que respete la propiedad intelectual en Internet, y al mismo tiempo facilite el acceso de los usuarios a una oferta legal de contenidos de calidad que les resulten atractivos. Paralelamente es necesario trabajar de manera decidida en la sensibilización y en la educación de los consumidores sobre el respeto a los derechos de autor y el valor de la creación cultural, como piezas fundamentales para el desarrollo y la extensión de contenidos digitales.

Es necesario avanzar en la mejora de los sistemas de gestión de los derechos de propiedad intelectual en la era digital, buscar nuevas formulas que garanticen los legítimos derechos de autor, favorezcan la creación y la innovación, y que no perjudiquen el desarrollo de nuestras Industrias. Un paso adelante sería superar el modelo actual del canon digital, que por su carácter discriminatorio y su difícil convivencia con los nuevos modelos tecnológicos y usos culturales en Internet, no favorece el clima necesario para extender el desarrollo de la colaboración entre nuestras empresas.

En resumen, los retos que afronta el sector son importantes, y es responsabilidad de todos, profesionales, empresas y Administración, crear un entorno de colaboración y convergencia que facilite y promueva un crecimiento sostenible de nuestra industria de los contenidos digitales, así como el reconocimiento de su valor estratégico y económico para el desarrollo de la Sociedad Digital en España.

Martín Pérez
Consultor TIC
Vicepresidente primero de AMETIC

Un pensamiento en “Industria cultural e industria tecnológica, ¿enemigos o aliados?

  1. Me ha gustado su artículo. Cree usted que las medidas econòmicas que está tomando el gobierno español, van en la línea de esos requisitos, prioridades o necesidades que usted establece?
    Particularmente me da la impresión de que para nada. Con lo cual ese futuro posible y potencial del que usted habla se me antoja cada vez más lejano…y simplemente…no puedo llegar a comprenderlo

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